Tinte solidario.

Hace unos años en un mercado medieval descubrí lo que eran los tatuajes de "henna", me llamo la atención ya que no requieren agujas, y por lo tanto no penetra en la piel, son temporales y duran entre 2 ó 3 semanas y no perjudican daños a la piel.
La Henna es un planta de la que se recogen las hojas, se secan y se trituran hasta convertirlas en un fino polvo que mezclado con aceite de eucalipto, café, azúcar y zumo de limón, se obtiene la mezcla para teñir. Esta planta se localiza en países de Asia, África, India, China, Marruecos y Egipto, donde es parte de varias de estas culturas este tipo de tatuajes.

Buscando información sobre este tema encontré un anuncio de una asociación, que me pareció muy interesante. 
Esta asociación se llama "Henna Heals" es una comunidad global que crean "coronas de henna" para personas que luchan contra el cáncer y sufren la pérdida del cabello, como consecuencia de las sesiones de quimioterapia.

Su creadora la fotógrafa Frances Darwin, asegura que son una experiencia sanadora, teniendo como objetivo que las personas no se sientan enfermas, sino que se sientan femeninas y hermosas; comento en una entrevista.


Flores, mensajes de esperanza, símbolos y otros adornos reemplazan los mechones de pelo para dar ese ánimo que tanto se necesita en la lucha contra esta enfermedad.

La asociación está formada por voluntarios, comenzó con 5 mujeres en Canadá y a día de hoy cuenta con más de 150 artistas de todo el mundo.
Aquí os dejo su página oficial:  http://francesdarwin.wixsite.com/henna-heals.

Sustituyendo la Henna por tatuajes de verdad, se encuentra otra noticia similar que ha conmocionado a medio mundo. Es el caso de tatuar el pezón en 3D de un seno tras una mastectomía. Este tipo de operación quirúrgica se realiza contra el cáncer de mama.

Uno de los artistas que inicio esta práctica con más de 15 años en el arte de tatuar, es Vinnie Myers apodado "Da Vinci de los pezones" ha tatuado más de 4.000 pezones.

Estas obras de arte provocan en mujeres que han perdido su pecho y su pezón, que se vuelvan a sentir "completas" devolviéndolas esa confianza provocada por la pérdida de una parte de su feminidad.
Este método presenta ventajas respecto a la cirugía ya que el resultado no deja cicatriz. Os dejo un video que realizo una paciente:  http://www.elmundo.es/cronica/2015/02/01/54cbe805e2704e912d8b457d.html

En España esta práctica aun no se ha definido del todo, aunque hay personas solidarias como Claire Louise Willis que desde hace tres años ofrece gratuitamente esta práctica una vez al mes en su negocio.

"Para cuando estas mujeres llegan a mi ya han pasado por tantas cosas... además suelen estar en dificultades financieras porque han perdido al menos uno de los ingresos de la familia, así que dedicar un día al mes a ofrecer este tratamiento gratuito es algo que pensé que podía hacer y es algo que me apasiona", le dijo a BBC Mundo.

"Todas las mujeres deberían tener esto al final de su tratamiento y con esta calidad", afirma.

 Al ver el resultado "están felices, muchas se emocionan y lloran."

Otro acto de generosidad es el que ofrece el Hospital Universitario de Torrejón, fue el primero en ofrecer a las pacientes de mastectomías este arte.
Hace un par de años, cuando el mundo del tattoo de la mano de Álvaro Quesada, se fusionó por primera vez en España con una unidad de mama. En este hospital ya habían probado con la micropigmentación era menos lesiva y más barata que la cirugía, pero se borra, y cuando pasa el tiempo, el color del pezón es diferente.

Este tatuador está totalmente implicado en la causa ya que a sus 32 años sabe lo que es perder una parte del cuerpo, en su caso un ojo por un tumor en el nervio óptico, "Nunca he ocultado que yo me he implicado mucho por el tema de mi ojo, porque me parece igual de injusto que no me garanticen una prótesis como que dejen una mama sin pezón" cuenta.
Comenzó tatuando en el propio hospital y siguió impartiendo talleres a cirujanos y enfermeras. Sus motivaciones son muy distintas a las de otros tatuadores o micropigmentadores, que llegan a cobrar 300 o 400 euros por un pezón. Y por eso lo hace gratis.


Por desgracia todos tenemos un familiar, un amigo o un conocido que lucha contra esta enfermedad y ver que este tipo de actos tan generosos por ayudar a esas personas a ser felices después de tanto sufrimiento, me hace seguir creyendo que todavía queda algo de bondad en el mundo.
Publicado por: Alba.

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